Esta gran idea nace de una persona comprometida. Jorge García, un
aficionado al longboard. El vive el día a día en el hospital de Oviedo
donde trabaja.
Jorge ve a la gente pasar malos momentos por culpa de
todo tipo de enfermedades y en un momento dado se plantea qué poder
hacer para echar un cable. De ahí surgió el hacer un día con actividades
en la playa relacionadas con el surf y una finalidad totalmente
desinteresada: donar todo el dinero que se recaude a la Asociación
GALBAN (asociación de familiares de niños con cáncer de Asturias).